Hola, ¿cómo estás?
Esta vez, te quiero hablar de esos detalles que hacen la diferencia. Cosas delicadas, útiles y simpáticas.
Todos los invitados se fijan si la música estuvo buena, si la comida era rica, el vino de calidad, pero uno también pone el ojo en ese “algo” diferente. Las amenidades son ideales para agasajar a tus invitados, hacerlos sentir mimados. ¿De qué tipo de detalles te estoy hablando? Te voy a dar algunas ideas para que uses:
- Las canastitas de baño, ¿qué son? Este “amenity” es última moda en todas las fiestas. Es delicado y va a ser útil para todos. Se trata de un kit de productos que se pone en el baño de damas (también podés poner en el de hombres), para satisfacer necesidades que puedan surgir en la fiesta, ejemplo: hilos y aguja, aspirinas, peinecitos, pequeños desodorantes, limas de uñas, alfileres de gancho, toallitas…
- ¿Qué tener en cuenta al poner canastitas? Primero, preguntá en el salón cuántos baños hay, en total, de cada género, para saber cuántas necesitás. Considerá hacer canastas personalizadas: muchas empresas arman etiquetas y cajitas (o te venden ya la canasta armada, ¡y te desligás!) según la estética de tu fiesta, con sus nombres y fecha de casamiento, ¡queda hermoso! Si la hacés “casera” te recomiendo igual envolver o poner en sobres determinados elementos como toallitas o tampones, para que quede más discreto…
- Jabones especiales y flores. En lugar del jabón líquido del salón, si te importan mucho esencias y aromas, comprá jabón de lavanda, chocolate… los hay también en forma de pétalos de rosa (ponelos en una caja en forma de corazón, algunos ya se venden así) o pequeños jaboncitos con forma de corazones. No olvides poner arreglos florales pequeños en las mesadas de los toilettes, o algunas velas flotantes, queda muy bien…
- Badanas u ojotas. Salimos del baño y nos metemos en la pista de baile. Nada más típico que, llegada cierta hora, a todas nos duelan los pies y nos saquemos los zapatos o dejemos de bailar, ¡evitalo! Para eso, se entregan unas sandalitas de tela llamadas “badanas”, junto con el cotillón o una tanda antes. Se venden en los cotillones en tela rasada, flúo o con lentejuelas. También podés hacer ojotas. Todo esto se puede personalizar con sus nombres y fecha de la boda, y es otro souvenir para entregar, ¡las chicas y sus pies te lo van a agradecer!
- Pañuelitos de papel con monograma… “si querés llorar, llorá”. Hay empresas que graban en sobrerrelieve pañuelos descartables con un dibujo alusivo y sus iniciales. Pueden dárselos a los íntimos en el templo, para que usen un par para llorarse la vida y guarden el resto de recuerdo. También pueden estampar las clásicos pañuelos de tela ¡un detalle muy dulce!
- Ganchos para colgar la cartera. ¿Conocés esos ganchos que se apoyan sobre la mesa, y sirven para colgar el bolso debajo de ella? Por el tipo de sillas que hay en las fiestas, encima vestidas, dónde poner la cartera es todo un tema. Estos ganchos son lindos, no son caros y son prácticos. Ponelos en todos los sitios en donde se sienten mujeres y después, ¡que se los lleven como souvenir! Acordate de avisarles que se los pueden llevar.
- Para los chicos. En muchas fiestas, los nenes son pocos, se sientan con sus papás y se aburren. Podés poner en la mesa algunos juegos de ingenio, rompecabezas u otros juguetes de ese estilo, que después se lleven también de regalo. Los chicos entretenidos, los papás, agradecidos.
Te aconsejo que pienses todos estos detalles en función de la onda general de la fiesta: si es informal, que sean descontracturados, si es romántica, todo bien dulce, con pétalos, corazones, si es en colores “shocking”, también seguí esa línea…
Dejate asesorar por ambientadores para hacer lo de los baños y por quien te venda el cotillón para las badanas. No lo dejes para último momento, son detalles, pero tenés que elegirlos bien, buscar el que más te guste y se adapte a la identidad de tu fiesta.
¡Mimá a tus invitados, que ese día ellos te van a estar mimando a vos!
Besos
Juju
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