Tips para quienes decidan viajar en lugar de hacer una fiesta

La idea de hacer un viaje en vez de una fiesta comenzó en los 90’, como una moda entre quinceañeras que cambiaban el vestido por Disney, pero hoy puede extenderse a novios y a bnei mitzvá ¿Te tienta más subirte al avión que bailar el vals? Entonces, leé con atención, porque esta nota es para vos.

Olvidate de las convenciones sociales, nada está impuesto. La mejor manera de festejar es la que más feliz te hace. Si después de celebrar tu bar o bat sentís que la forma más linda de coronarlo es conociendo Disney con tu familia, o si tras de la jupá piensan que es mejor viajar por toda Europa, que invertir fortunas en una fiesta y limitarse a una luna de miel más modesta, ¿por qué no?
Analicemos juntos por qué podrían elegir viajar en vez de una fiesta y, si lo eligen, cómo planificarlo y que sea una verdadera celebración:

• Primero: ¿por qué hacerlo? Puede haber muchos motivos. El principal tiene que ser que les guste más la idea de viajar, claramente. Muchos pueden no hallarse en el “protocolo” hiper-convencional de una fiesta, no querer ser el centro de atención  o sentir que, de los familiares y amigos que invitarían, sólo tienen relación real y cercana con un 10 o 20% ¿Entonces, qué mejor que celebrar en la intimidad de la pareja o de la familia?

• No sientan que no van a compartir nada con los familiares. Cuidado con los reproches. En todo caso, si alguien se queja o critica que no haya fiesta, se está corriendo del eje: lo más importante, en un bar, bat o casamiento, es aquello que van a vivir en la ceremonia. Es eso lo que tienen que compartir con todos sus allegados, y esa es la verdadera celebración. Que, por extensión, llamemos casamiento, bar o bat a la fiesta, es otra cosa. Si lo desean, hagan un pequeño brindis en el templo o una cena íntima, para no sentir que “no pasa nada” luego de la ceremonia.

• Rubros que, igual, no pueden faltar. No va a haber fiesta, esto lo tenemos en claro, por lo tanto, el proveedor que ocupará nuestra cabeza es la agencia de viajes. Sin embargo, la ceremonia es un momento único, no olvidemos poner energías en ella. Contratemos foto y video para registrarla (si no tienen que cubrir la fiesta, será más económico) y démosle importancia a la vestimenta, el peinado y el maquillaje. Para las novias es una obviedad, seguro le darán relevancia al vestido aunque no haya fiesta, pero presten atención en el caso de los bnei mitzvá: usen un traje o un vestido que resalte la trascendencia del momento.

• Planifiquen con antelación. Si bien puede que no necesiten un año y medio, como para una fiesta, necesitan tiempo para ahorrar el dinero, pensar bien en el destino ideal para ustedes, averiguar sobre lugares para visitar en Internet y elegir la agencia adecuada. Cuanto antes reserven los vuelos, mejores precios conseguirán, y puede que obtengan promociones similares con los hoteles.

• ¿Dónde pueden ir las familias que celebran un bar o bat? Para las familias de bnei mitzvá, como pasa con las chicas de 15, el lugar más soñado y popular es Disney. Sin embargo, no es la única opción. Lo importante es que se cumpla el deseo del homenajeado y no de la familia. Pueden hacer un crucero familiar o ir a un all-inclusive en el Caribe,  busquen uno que tenga entretenimientos para chicos (si hay hermanos menores) y para adolescentes.

• ¿Dónde pueden ir los novios? Con el mismo dinero que se gasta en una fiesta de casamiento importante, podrían recorrer Europa sin privaciones. Si por el tipo de empleo que tienen pueden tomarse un mes o más, ni lo piensen y conozcan todas las ciudades destacadas del viejo mundo. Si prefieren la playa, pueden ir a los más paradisíacos lugares de Tahití, la Polinesia… también pueden hacer un crucero para parejas y, ¿por qué no rescatar al niño interior y optar, ustedes también, por Disney?

La posibilidad de viajar es ideal para homenajeados descontracturados, poco tradicionalistas y que sientan que invertir mucho dinero en una noche no es lo que desean.
Si lo planifican con entusiasmo y con su impronta personal, este viaje va a ser una gran fiesta, la fiesta íntima y particular que tanto soñaron. Atesoren estos momentos inolvidables y recuerden, cada día del viaje, que están ahí porque están celebrando un hito en sus vidas, ¡no es una vacación más!