¡Hola amiga! ¿Cómo estás?
Hoy una prima me comentó que después del civil no hacen nada, ¡nada! Y no es un tema económico, la fiesta va a ser en uno de los salones más caros de la ciudad, el vestido se lo hizo con un diseñador famoso… a mi prima Yami, precisamente, no le falta guelt. “¿Por qué no hacen nada?”, le pregunté. “Es que el civil es un trámite”, me dijo, “el casamiento de verdad es el domingo”.
Cada uno es dueño de hacer lo que quiera con su boda, pero a mí, amiga, no me parece muy acertada la idea de mi prima. El civil no es un trámite más, ¿me vas a decir que es como renovar el registro o pagar las expensas?
Pensá: van a estar uniéndose ante la ley, es el momento en que sientan las bases legales de su familia. A vos, que seguro le das más importancia, te propongo varias opciones para que elijas junto a tu futuro maridito y ¡a celebrar!
Almuerzo/cena en un restaurante. Elijan un lindo restó de ambiente tranquilo, elegante. Si hacen una reserva, contemplen que la ceremonia puede atrasarse un poco, pidan un margen de tolerancia. Si quieren tener previsibilidad con el gasto, elijan un lugar con cubierto fijo. ¿Consejito? No dejen de aclarar que están celebrando el civil, seguro les bonifican los cubiertos de los novios o les regalan el champagne para el brindis.
Festejo casero. Si tienen la suerte de tener una casa grande, o de que tus papás o suegros la tengan, ¡adelante! Eso sí, nada de poner a mamá o a tu suegra a cocinar. Hoy hay servicios de catering a domicilio muy top, como sushi libre, o más descontracturados, como un pizza o pasta party. Fijate que sea siempre un servicio para comer con las manos (“finger food”), para no tener que acomodar a todos en la mesa.
Fiesta en un salón más pequeño. Pueden optar por un salón más chico que el de la fiesta del gran día. No es tanto más caro que ir a un restaurante. Hay varios salones que ofrecen su espacio para 40/50 personas, con servicios de catering medianamente económicos ¡Además en un salón pueden bailar! ¡Un festejo de civil bien arriba!
¡En un barco! ¿Te sorprendí, no? Bien romántico, después de dar el sí, a navegar… Hay varios servicios que ofrecen fiestas a bordo de alrededor de 4 horas. Con esta opción (aunque es un poquito más cara) van a sorprender…
A la hora del té. ¿Quién dijo que el civil tenga que ser celebrado con una cena o almuerzo? Si se casan a la tarde, una opción súper delicada (y mucho más económica) es compartir una merienda en una elegante casa de té.
Como ves, hay opciones para todos los bolsillos y gustos. Piensen en qué es lo más práctico, lo que más los representa, en definitiva, lo que tienen ganas de hacer ustedes, los novios, después del “si quiero”, libreta roja en mano.
¡Que hagan una gran elección y disfruten mucho del primer paso de la boda!
Besos y hasta la próxima,
Judith
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