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Tips para cuidar a tu familia en la previa al Bar o Bat

Hola, ¿cómo van esos preparativos?
Mirá, ambas somos “idishe mame” entonces me vas a entender lo que te quiero decir. Así como  por ser mujeres tenemos trastornos hormonales, también es una cuestión genética (está en nuestra naturaleza) de mujeres de la cole ser “idishes mames”. ¿Coincidís conmigo, no?

En consecuencia no te habrá parecido disparatado que te quiera asesorar desde mi experiencia como mamá devenida en  Bar Mitzvá Planner acerca de cómo cuidar a tu hijo, a sus hermanos, a tu marido ¡y a vos! los días previos al soñado Bar Mitzvá.

Me detengo aquí para resaltarte que refiero sólo a los días previos porque quiero pedirte que no sometas desde un año (o varios meses) antes del evento a toda tu familia a cuidados excesivos “por las dudas que  se resfríen, se quiebren una pierna o brazo, se queden afónicos, etc.

Ya sé que puede pasar (¡decí y hacé “Hamse” para que no suceda!), no tenemos la buena salud asegurada y es real que debemos cuidarnos especialmente en la previa, pero para que no te vuelvas una obsesiva al respecto comparto con vos algunas sugerencias preventivas y para descontracturar y reírnos de nosotras mismas uso las frases de cabecera de una idishe mame:

  • “Abrigate que hace frío”. Digamos que te acepto que desde un mes, dos semanas, antes de Bar-Bat te pongas “hincha” al respecto, pero sólo si es durante la época en que hace frío.
  • “No te quejes si tenés sueño”. Es importante que tu hijo descanse bien, pero te pido que entiendas que el hecho que esté tan cerca su Bar Mitzvá le genera estrés por lo tanto es natural que necesite mirar tele hasta más tarde o le cueste dormir como un angelito. 
  • “¡No comiste nada!”.  En este ítem levanto la bandera  que dice “no al doble discurso”. Si torturás a tu hijo con que no llegue con esos “rollitos demás” a su Bar, que se controle con las comidas, no te contradigas lanzando la frase automática “nene, pero no comiste nada”. En todo caso te sugiero armar una dieta semanal, incluyendo “los permitidos”, si es necesario que lo haga un nutricionista. Si tu hijo/a no tiene problemas de peso… dale mayor libertad. También tené en cuenta que su apetito puede variar los días previos al evento por la ansiedad.
  • “Te vas a golpear”. He aquí el lema de toda idishe mame sobreprotectora. Que levante la mano la que no se la pasa diciendo esto tooodo el tiempo. A nuestro favor, es real que ciertos recaudos hay que tener desde algunas semanas antes para, en lo posible, prevenir desgarros, moretones, etc. Si tu hijo practica deportes mi consejo es que lo dejes continuar con su rutina, pero pensé que también puede tropezarse con una baldoza y golperse (¡hacé hamse de nuevo!).
  • “Después no digas que no te avisé”. Seguro que te surgió una sonrisa pícara cuando leíste el encabezado de este tip.  Las idishe mame creemos que tenemos el poder de anticiparnos a todo cuestión desafortunada que pueda suceder.  Ahora soy yo la que te avisa que es necesario que les des un respiro a tus seres queridos que ya están grandecitos para cuidarse… ¡te lo ruego!
  • “Esto no es un hotel”. ¿Vos te creés que tu hijo no lo sabe? Por eso no lo acoses reclamándole mayor presencia en el hogar. Es un pre adolescente y está lleno de actividades: el colegio, el curso de Bar, cursos, deportes, etc. ¡Encima las idishe mame les agregamos la presión porque pasen más tiempo en casa, se abriguen, coman bien, descansen,  nos llenen de besos y digan cosas lindas…  ¿no será demasiado?

En síntesis, te sugiero que respires profundo y aunque te cueste compartas con tu familia la importancia de tener ciertos cuidados especiales las semanas previas al gran evento, pero todo en su justa medida.

¡espero que te hayan servido mis consejos!
Besos,

Vanesa, la idishe mame

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